En la región los retos no son menores, existen marcadas desigualdades y desafíos que van desde problemas políticos hasta poca penetración tecnológica o falta de acceso a la educación, aun con eso las mujeres se han convertido en emprendedoras todo terreno, pero, ¿cuál es su secreto?
Con la tecnología por delante
Cada vez más, la tecnología se está colocando como una vía que abre las posibilidades de crecimiento para un negocio, eso ya es una ventaja enorme; pero el potencial creativo y resiliente está y seguirá estando a cargo de las personas.
Las emprendedoras están creando empresas que tienen como objetivo abordar las desigualdades basadas en el género, la pobreza y la falta de acceso a la educación y la atención médica. También están buscando nuevos usos para la tecnología, al ponerla al servicio de su comunidad, es decir, están democratizando las oportunidades para todas y todos.
En América Latina, muchas mujeres emprendedoras están desarrollando aplicaciones móviles que tienen como objetivo mejorar la salud y el bienestar de otras mujeres, proporcionándoles información útil y fidedigna, u ofreciendo servicios de telemedicina que permiten a personas de comunidades lejanas a las grandes urbes o que se encuentran en una situación vulnerable, recibir atención médica de calidad a través de dispositivos móviles.
Tomando las riendas
Las mujeres, en particular las latinas, están derribando barreras de entrada tradicionales, cuestionando las creencias sobre lo que se necesita para ser un emprendedor exitoso y cómo se ve. Ellas están creando empresas en una amplia gama de industrias, desde la atención médica y la tecnología, hasta el comercio minorista y las finanzas. En ese sentido, también están aportando una perspectiva fresca al mundo del emprendimiento, con muchas de ellas enfocándose en el impacto social y ambiental, en lugar de sólo guiarse por el éxito financiero.
En los últimos años, los fondos de capital de riesgo (VC por sus siglas en inglés) están apostando más por ella y hay varias razones para esta tendencia. En primer lugar, el reporte Women Matter México 2022, de McKinsey & Company refiere que las empresas fundadas por mujeres con frecuencia funcionan mejor, alcanzan 48% más crecimiento y los equipos de trabajo tienen 76% más probabilidad de alcanzar los objetivos planteados. Esto ha llevado a muchos inversionistas a ver a las mujeres empresarias como una buena opción para sus portafolios, ya que son más propensas a generar buenos retornos de inversión.
El camino por recorrer todavía es largo. En 2022, las empresas con al menos una cofundadora mujer (es decir, equipos mixtos), recaudaron 17.2% del capital disponible en VC; mientras que las empresas fundadas únicamente por mujeres tan solo recaudaron 1.9% del capital de inversión de los fondos VC, de acuerdo a PitchBook.