“Para mí hay tres principios de liderazgo fundamentales: la claridad en la visión, rumbo y misión de la compañía”, dice Aspe, en entrevista con Expansión Mujeres.
Desde que fue nombrada directora interina, apenas un mes después de que se declarara la pandemia de coronavirus, tiene claro que para sortear la crisis derivada de la emergencia sanitaria se requiere de un liderazgo con una visión muy clara de hacia dónde va la organización.
“Se puede alinear a un equipo con el que no se está en contacto para orientar las metas que queremos lograr”, dice la directora de una empresa, cuyo giro ha sido precisamente primordial para el mantenimiento de las operaciones de su compañía y las de muchas otras que tuvieron que seguir trabajando desde casa para evitar los contagios de coronavirus.
En 2020, la firma estadounidense tuvo ingresos totales en México por 2,562 millones de dólares en 2020, una caída anual de 10.7%. Aspe sabía que no sería fácil, debido a la pandemia de COVID-19.
Pero primero, lo primero: ¿cómo se trabaja con un equipo tan grande a la distancia?
“La capacidad de motivar al equipo y que lleve las acciones necesarias para lograr las metas es crucial, sobre todo porque la pandemia ha durado tanto. El equipo debe estar claro de a dónde vamos, por eso se tiene que generar ánimo y a la distancia”, asegura.
La exfuncionaria pública (fue subsecretaria de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes entre 2015 y 2017) se considera una persona muy flexible al cambio. “Fui emprendedora, tuve una consultora de asuntos públicos, trabajé en el Intituto Federal de Telecomunicacones (IFT), trabajé en la reforma de telecomunicaciones (2013)”, cuenta.
Su comienzo como directora interina de AT&T fue un reto pues coincidió con un momento sanitario crítico en el país. “Yo tengo un privilegio enorme: tengo un equipo completo y sano, pero el reto es enorme. Quienes tenemos ese privilegio debemos estar conscientes de que no somos la regla y que tenemos que actuar en consecuencia”, sostiene.