Recientemente he escuchado, y sabido, de varias mujeres jóvenes que dicen abiertamente que no quieren tener hijos o que se están cuestionando si la maternidad es algo que desean en su vida. Las entiendo, ser mamá y continuar creciendo profesionalmente no es sencillo. De acuerdo con datos del IMCO (Instituto Mexicano para la Competitividad), en México, siete de cada 10 mujeres que participan en el mercado laboral son madres.
Maternidades flexibles, un proceso necesario
Las empresas tienen un rol importante para modificar el panorama de la maternidad en México al impulsar acciones que ayuden a quienes ya son madres y a quienes desean serlo.
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Si a la carga laboral sumamos el trabajo no remunerado del hogar, el panorama se complica. De acuerdo con datos del mismo instituto, en el país hay una gran disparidad en términos de cuidados y tareas del hogar, ya que una mujer en promedio dedica 40 horas a la semana a esta tarea (casi seis horas diarias, lo mismo que una jornada laboral). Mientras que un hombre dedica 15.9 horas semanales a las mismas actividades (tan solo dos horas al día).
Esta combinación ocasiona desventajas significativas para el desarrollo personal y profesional de las mujeres ya que se ven obligadas a trabajar menos horas, lo que trae consigo ingresos inferiores e incluso, interrumpen su desempeño en trabajos tanto formales como informales.
En este sentido, las empresas juegan un papel fundamental para mejorar las condiciones de la maternidad en México. Ofrecer beneficios y facilidades para las mamás y aquellas que desean serlo es indispensable. Tres acciones clave para promover un entorno laboral más acogedor para las mamás son crear más oportunidades formales, eliminar la brecha salarial, al igual que dar prestaciones y beneficios superiores a las de ley.
Actualmente 58% de las madres de México trabajan en la informalidad, según datos del IMCO. Esto ocasiona que tengan bajo o nulo acceso a seguridad social e incertidumbre que impacta negativamente su salud. Las compañías pueden modificar ese porcentaje no sólo porque sea lo correcto, sino porque las mujeres aportan diferentes perspectivas y habilidades, creando un círculo benéfico entre ellas y las empresas.
La segunda acción que las empresas deben promover es desaparecer la brecha salarial para fomentar que las nuevas generaciones tengan la oportunidad de ser madres con estabilidad económica y al mismo tiempo garantizar que aquellas que ya lo son puedan proveer a su familia. El IMCO reporta que existe un 14% de disparidad salarial en México, es decir, por cada 100 pesos que un hombre gana, una mujer obtiene únicamente 86 pesos. Esto genera que las mujeres tengan más dificultades para ser económicamente independientes.
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Finalmente, las prestaciones que ofrecen las compañías deben estar diseñadas para verdaderamente facilitar el balance de vida de sus empleadas. Dar permisos de maternidad superiores a las 12 semanas de ley, implementar horarios flexibles, ayudar en trámites de adopción o fertilización asistida, otorgar permisos por motivos personales, ofrecer seguro de gastos médicos menores y mayores para los dependientes económicos, son acciones que pueden marcar una diferencia significativa.
Desde mi experiencia, cuando comencé a trabajar no había tanta apertura en brindarle a las madres la oportunidad de poder compaginar su vida laboral con la familiar; tuvimos que elegir, en la mayoría de las ocasiones a la familia y luego, cuando nuestros hijos fueran mayores, reincorporarnos a la vida laboral con un sinfín de nuevos retos. Afortunadamente pertenezco a una compañía, y un área en particular, que se preocupa todos los días por mantener el balance de todas nosotras, además de procurar nuestro desarrollo profesional a través de mentorías, herramientas y recursos esenciales, que nos empodere a lograr nuestras metas.
Espero que cada vez se converse más acerca de la importancia de las madres trabajadoras. Además de las parejas y la familia, las empresas también son actores importantes para facilitar el balance entre la vida laboral y personal de las madres de familia. Sigamos promoviendo espacios profesionales que motiven e incentiven a las mujeres a perseguir sus sueños profesionales y vivir su maternidad plenamente.
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Nota del editor: Rosa María Espinosa es Gerente Internacional de Beneficios en Amazon México. Síguela en LinkedIn. Las opiniones publicadas en esta columna corresponden exclusivamente a la autora.
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