¿Qué es la violencia estética?
Este tipo de violencia surge de la presión social para cumplir con ciertos estereotipos físicos que culturalmente se han constituido como el ideal de belleza, explica María Elena Esparza, maestra en Desarrollo Humano por la Universidad Iberoamericana e integrante de la Generación 2022 del Programa de Liderazgo de Mujeres en la Universidad de Oxford.
"Esa presión se expresa en una autoexigencia que pone en riesgo incluso la salud física y mental. Para quienes no cumplen con el prototipo de imagen aceptada socialmente, hay burlas, bromas hirientes y discriminación permanente que minan su autoestima y autoconcepto", señala en entrevista con Expansión Mujeres.
La violencia estética, apunta Ángel Álvarez, académico de la Pontificia Universidad Católica de Chile, es ejercida por personas que reproducen esta norma de belleza, al considerar que es universal y que no acepta la diversidad de los cuerpos.
"La violencia cosmética [como él la denomina] es ejercida por toda la sociedad y la misma es víctima, pero definitivamente quienes lo hacen de forma más consistente son los varones que se asumen con superioridad étnica y lo hacen desde espacios públicos, hasta la pareja, familiar o compañero, de cualquier mujer en los espacios más íntimos", afirma.
Daphnia Ricalde, activista a favor del body positive conocida como La Cuerpa, opina que la violencia estética es sobre todo heteropatriarcal porque "les dice a las mujeres que deben lucir de cierta forma para ser aceptadas, respetadas y amadas".
La activista afirma que la interiorización de ese discurso se da debido a que se produce en todas las esferas de las vida de las personas, incluidas las del trabajo. "Este tipo de violencia está tan invisibilizado que se normaliza todo tipo de interacciones que conlleven un juicio, sólo porque quieren tener total control sobre nuestros cuerpos", dice.