Martha Hernández, directora de la Librería U-tópicas, especializada en temas alrededor de los feminismos y el género, afirma que en el mundo la proporción es de 70-30% en términos de hombres y mujeres publicados en el mercado editorial. Por eso surgió el proyecto, que solo ofrece obras de autoras. Su objetivo era convertirse en un escaparate que diera espacio a la creación hecha por mujeres y no solo editorial: también cuenta con una galería y ofrecen piezas de arte, gráfica, encuadernación, diseño textil o joyería.
“Hay que reconocer que el mundo editorial está formado, en su mayoría, por empresas privadas que deben buscar beneficios para sus socios, por lo cual se rigen con criterios de rentabilidad. Uno de ellos es que tienen más aceptación los autores, sobre todo si hablamos de creadores emergentes”, dice.
Para U-tópicas, como para la mayoría de las creadoras, el mayor obstáculo ha sido la relación con las grandes editoriales y distribuidoras. “Por estrategia de mercado, no atienden a librerías pequeñas, así que hay que insistir mucho, darles mucha lata y poco a poco nos han comenzado a surtir pedidos. Entendemos que prefieran surtir toda su producción a grandes mayoristas, aunque tengan que darles unas comisiones altísimas, pero esas políticas nos ahogan pues las grandes cadenas de librerías se quedan con todas las novedades y además bajan los precios de manera desleal”, señala.
Hernández explica que librerías como la que dirige pueden ser rentables a mediano plazo, siempre y cuando se invierta creatividad en la constante búsqueda de fórmulas, pero también de estrategias comerciales con el apoyo de inversionistas.
En medio de esfuerzos por incluir a más autoras, este año nació otro proyecto de venta de libros usados llamado Las Amazonas, que se enfoca en libros en torno a mujeres por su creciente demanda en plataformas digitales.
“Como vendedor de libros, el proyecto general que es Grafógrafo Libros, ya cuenta una audiencia relativamente grande, decidí abrir cuentas alternas que se enfocaran en cierto tipo de libros, con cierta temática más específica", señala Jair Alburquerque, el fundador de la librería que se ubica en Tijuana, Baja California.
"Así creé La Hélade, enfocada en literatura y cultura del mundo antiguo; Lectorcitos, para literatura infantil; Oreja Cortada, dónde se pueden encontrar libros sobre las diversas artes; Polyglottos, para libros en otros idiomas y, claro, Las Amazonas, que por cierto a escasas semanas de haber sido abierta pinta para convertirse en la que más interés suscite de todas”.