Podría ser altanera, inalcanzable: su recorrido científico le daría la posibilidad de serlo y aún así, ser prestigiosa. Pero en lugar de eso, Julieta Fierro es esa mujer que te recibe en su casa, te hace enchastres con agua en su propia mesa para demostrarte cómo un experimento es mucho más poderoso que todas las teorías del mundo, te regala chocolates para hacer una metáfora sobre la felicidad y los retos de la vida, y te dedica dos horas de su vida de la forma más generosa posible.
Desde sus primeros años como estudiante de física en la UNAM, hasta convertirse en una de las divulgadoras científicas más queridas y respetadas de América Latina, Julieta Fierro fue y sigue siendo una voz incansable para la ciencia. Pero su historia no solo es una acumulación de logros académicos, sino un testimonio de cómo la pasión por el conocimiento puede cambiar vidas, cómo la ciencia puede ser accesible y, sobre todo, cómo una mujer puede enfrentar barreras sociales y culturales para alcanzar las estrellas.
Julieta nació en la Ciudad de México en 1948, en una época donde las oportunidades para las mujeres eran limitadas. En un México donde se esperaba que las mujeres fueran amas de casa, desafió las normas al encontrar en la ciencia un espacio para cuestionar, descubrir y aportar.
Desde joven desarrolló una habilidad única para explicar conceptos complejos de manera sencilla, algo que ella misma atribuye a su relación con su hermano Miguel, quien tenía síndrome de Down. "Mi hermano quería aprender de todo, y yo quería enseñarle. Fue él quien me enseñó a explicar fácil. Usábamos experimentos caseros, nos divertíamos mucho y al final, ambos aprendíamos," comenta Fierro. Esa conexión sembró la semilla que más tarde la convertiría en una divulgadora científica apasionada.
Su carrera despegó en la Facultad de Ciencias de la UNAM, donde estudió física y luego se especializó en astronomía. En lugar de quedarse en laboratorios o aulas, entendió que la ciencia no tiene sentido si no se comparte. Por ello, se dedicó a la divulgación, uniendo al universo con el público general. Hoy, con más de 40 libros publicados, programas de televisión y colaboraciones internacionales como la NASA, su impacto sigue expandiéndose.