¿Qué es el lenguaje inclusivo?
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas, se entiende por lenguaje inclusivo una manera de expresarse oralmente y por escrito sin discriminar a un sexo, género social o identidad. Su uso ha causado discusiones en distintas esferas de la vida pública como redes sociales o conversaciones personales, sin embargo, un lugar en el que su adopción no se ha generalizado es en los centros de trabajo.
Los motivos por los que el lenguaje inclusivo no es una de las principales conversaciones dentro del mercado laboral son diversos y pueden apuntar al desconocimiento sobre por qué debería o no utilizarse o, incluso, miedo al rechazo.
Para Karla, usar el lenguaje inclusivo es un acto para reconocer la diversidad ante estructuras y buscar buenas formas de expresión, pues éstas se pensaron y reprodujeron mediante el uso del lenguaje androcéntrico y binario (enfocado en dos géneros).
Andrea Villagómez, gerente senior de Cultura Organizacional en Babbel, sostiene que falta de diversidad e inclusión en la comunicación, las políticas y la cultura de la empresa puede ser un agente estresante en el entorno laboral. Y la negligencia en esta área, advierte, puede reforzar los sesgos, causar daño a la autoestima y generar ansiedad, así como fomentar la inequidad entre los empleados.
La especialista cree que defender la diversidad en el lugar de trabajo es un factor crucial en el bienestar de las empleadas y empleados y conlleva la responsabilidad de tomar medidas activas para evitar prejuicios, jerga o expresiones que puedan discriminar a personas o grupos en particular.
"La comunicación dirigida a todos los públicos, y no solo a algunos, es el mejor camino hacia una comunicación eficaz y un entorno de trabajo saludable. Es por eso que las organizaciones deben garantizar que líderes, la gerencia media y los empleados comprendan la importancia de las palabras y que la elección sobre su uso, intencionalmente o no, puede incluir o excluir a otros", afirma.
Además, asegura que el idioma juega un papel trascendental en la lucha contra la exclusión. El lenguaje, continúa, es un organismo vivo, en constante evolución, siempre en consonancia con los acontecimientos y cambios sociales que nos rodean.
"Para las organizaciones es más importante que nunca mantenerse al día y utilizar un lenguaje inclusivo. Esto no solo garantiza que todos sean vistos de la forma en que quieren ser vistos, al mismo tiempo crea un espacio seguro donde las personas pueden sentirse valoradas y también es un paso necesario para desafiar los prejuicios conscientes e inconscientes", señala. "Las iniciativas en torno al lenguaje inclusivo ayudan a eliminar los obstáculos vinculados a los estereotipos y favorecen el desarrollo de acciones a favor de la igualdad profesional".