¿Cuál es la relación de las mujeres con el ahorro?

Marilú Ayala, fundadora de Café de Finanzas, agrega que, cuando las mujeres son jefas de hogar y en el día a día tienen que hacer frente a los gastos de la casa y los referentes a los cuidados, es difícil que ahorren al ser el sostén de la familia.

"Y en general podemos ver que el imaginario colectivo no nos enseña ni percibe que las mujeres puedan ahorrar o invertir, aunado a que hay muy pocas que tienen acceso a educación financiera", agrega.

Otros impedimentos para que mujeres ahorren, de acuerdo con Brenda Montes de Oca Gallegos, gerente de Inversión en kubo.financiero, inversionista en bienes raíces y en instrumentos con bajo riesgo, tiene que ver con que prefieren medios informales de ahorro, como las tandas, o disponer el dinero en efectivo para contar con liquidez.

"En México somos 64.5 millones de mujeres, representamos 51% del total de la población nacional, pero menos de la mitad de las mujeres tienen el hábito del ahorro y de esa población [39 millones de mujeres], sólo 0.07% tiene un fondo de inversión", apunta en entrevista.

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¿Cuáles suelen ser las mayores necesidades de una mujer para ahorrar?

Ayala recomienda que las mujeres generen un fondo de ahorro para ellas mismas, separado del que se tiene para la familia. Esto dará independencia económica a la hora de tomar decisiones, como por ejemplo, dejar una relación o adquirir un patrimonio.

Sofía Galán menciona como prioridades para ellas el ahorro para el retiro y para mantener la salud de las mujeres. "Alrededor de 50% de todo el gasto en salud en México sale del bolsillo de las personas. Se necesitan más seguros de salud que atiendan de forma efectiva la salud de las mujeres", afirma.

¿Qué se puede hacer para que más mujeres ahorren?

Thayde Olarte explica que dos de los retos que el sistema financiero enfrenta para acercar a más mujeres a instrumentos de ahorro son la ampliación de la infraestructura de acceso para productos y servicios, punto en el que el avance tecnológico ha sido un aliado determinante al permitir realizar operaciones sin acudir a una sucursal, y el fomento de mecanismos alrededor de la educación financiera, porque mientras más mujeres conozcan todo lo que pueden lograr con un uso adecuado de los productos y servicios, habrá mayor apetito por aprovecharlos.

"En gran parte muchos de los puntos se concentran en la política nacional de inclusión financiera. Bajo este paraguas se lleva el seguimiento de indicadores, eventos, actividades que faciliten el acceso a productos, servicios y a su uso cotidiano. Por eso es importante seguir apoyando y generando nuevas iniciativas en este sentido para avanzar de mejor manera e impulsar de manera puntual el ahorro", detalla.

Para Marilú Ayala una solución es hacerles saber a las mujeres que es posible empezar a ahorrar en diferentes niveles de acuerdo con los diferentes contextos que viven.

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Los

beneficios de incrementar los niveles de ahorro en las mujeres

Uno de los mayores beneficios, según Marilú Ayala, es la independencia económica, ya que ésta protege a las mujeres de la violencia económica, física y psicológica. "En palabras de mis alumnas, se sienten más felices al ver que pueden ahorrar e invertir por primera vez. Una vez que se sientan a aprender les resulta fácil y hasta divertido", dice.

Por su parte, Galán apunta que el beneficio también es para la sociedad, pues con ahorro las mujeres pueden ser autosuficientes, lo que llevaría a un crecimiento económico y una expansión del mercado laboral gracias a la incorporación de nuevo talento para generar más ingresos que permitan ahorrar.

Tips para empezar ahorrar e invertir

Brenda Montes de Oca recomienda empezar por registrar gastos mensuales. "Se debe partir de cuánto gano y cuánto gasto para tener una idea de la situación actual. Se pueden hacerse preguntas como: '¿estoy en números rojos?', '¿en qué meses tengo más gastos?', en referencia a los pagos de seguros anuales, mantenimiento del coche, vacaciones...", afirma.

También sugiere encontrar el origen de fugas de capital, como servicios contratados sin que los uses del todo, como plataformas de streaming, el gimnasio o comprar en línea en tiempos libres.

"Es importante empezar con metas de ahorro que sean a corto plazo y con un capital que difícilmente sea irremplazable como, por ejemplo, un puente largo para salir de vacaciones", señala. Para ello, es posible fijarse metas de tres o seis meses para lograr ese objetivo sin utilizar las tarjetas de crédito para hacerlo.

Galán recomienda empezar a invertir una vez que el ciclo de ahorro se estabilice y se vuelva consistente. "Además, tienen que asegurarse de que las necesidades básicas se estén cubriendo también de forma consistente", dice.

Para Olarte, el ahorro y las inversiones pueden ir de la mano. "Sólo es fundamental tener claro las condiciones de cada producto a contratar de acuerdo a las necesidades. Si el dinero que estoy ahorrando lo puedo utilizar en cualquier momento ante una emergencia, se requiere una cuenta de ahorros, que permite su uso las 24 horas del día y los siete días de la semana. Esto a diferencia de un pagaré que es un instrumento donde el dinero no lo puedo utilizar hasta que se cumpla la fecha de vencimiento y por el cual el banco paga intereses de acuerdo al monto y el plazo seleccionado", explica.

Para ello, señala que recibir una correcta asesoría puede ser clave para el uso oportuno de los recursos.