El 15 de septiembre de 2021, con su activismo, logró que la 64 Legislatura local aprobara que el registro de deudores alimentarios morosos fuera público y estableciera un certificado de no adeudo de pensión como nuevo requisito para acceder al matrimonio, contratos públicos y créditos financieros.
Ahora, junto con abogadas y otras colectivas feministas, lucha en el Senado de la República para que la Ley Sabina, que lleva el nombre de su hija, se aplique en todo el país. A nivel nacional el registro de deudores alimentarios existe sólo en la Ciudad de México, el Estado de México, Chiapas, Coahuila y Guerrero.
Conforme a su experiencia, Vázquez Ruiz asegura que el camino para que los padres cumplan con el derecho de sus hijas e hijos está minado de trabas que las hacen desertar. Afirma que las madres que logran una sentencia en los tribunales muchas veces no tienen garantía del cumplimiento.
Desde otra trinchera Alma Bautista Ramos, abogada oaxaqueña, también abona a la lucha. A través de TikTok brinda orientación jurídica a las mujeres y parodia los pretextos que ponen los padres de familia para no cumplir con su obligación.
La idea surgió por su propia historia. El papá de su hija argumentaba que no daba pensión alimenticia porque ella era “mala madre”.
“Empecé a hacer esto porque el contexto sanitario nos impedía hacer activismo de calle. Las redes sociales aumentaron su uso y era entrar a un espacio de socialización. Este es un espacio generoso y fluido que me permitió visibilizar y desnormalizar la problemática a todas las partes del país a donde pudiera llegar el contenido. Quería ser un punto de reflexión y dar a conocer de una manera muy fácil que la mayoría de nuestras actitudes devienen de estereotipos”, comenta.
Desde su punto de vista, lograr la erradicación de este tipo de violencia requiere de acciones integrales y transversales con perspectiva de género que involucren a los padres y madres de familia. “Debemos de sensibilizar a los hombres sobre paternidades cariñosas y responsables”, añade.