Hombre, blanco y de entre 40 y 50 años. Así era el perfil que trabajaba en la banca a finales de la década de los 90, cuando Gabriela Herrera comenzó su carrera “Me topé con que por lo menos 99% de las personas en la banca era así”, señala la líder en Latinoamérica de la fintech Provenir.
Ahora, Gaby Herrera tiene más de 20 años de experiencia en tecnología y finanzas en empresas tales como Banco Itaú de Brasil y HSBC de Estados Unidos. Como consecuencia de su desarrollo profesional tuvo que vivir en varios países, aprender nuevos idiomas y crecer negocios desde cero. Pero, a pesar de lo masculinizado del sector, ser la única mujer en la sala o una de las pocas en ocupar espacios para emitir su opinión no fue una constante en su crecimiento laboral. En el camino, se encontró con mentoras que la acompañaron en esa trayectoria.
“Tuve la suerte de llamar la atención de la única mujer en mi lugar de trabajo. Ella me enseñó todo lo que necesité para empezar a confiar en mí misma y en mi trabajo. Cuando estás acostumbrada a ser una de las pocas mujeres, te encuentras dudando de lo que sabes o de lo que puedes aprender, por eso considero que su enseñanza más importante fue convencerme de siempre pedir un lugar, una oportunidad”, explica.