"Empecé con retrasos en mi periodo, que me generaban angustia al pensar en un posible embarazo. Después fue peor, porque tenía hemorragias, que me venían en cualquier momento. Incluso me pasó dos veces en el trabajo y no pude ni pararme, porque se ensució todo", explica Teresa Santana, profesora de educación primaria, quien vivió síntomas más severos durante la menopausia.
Como Santana, muchas mujeres atraviesan por síntomas severos durante el inicio de la menopausia y, de acuerdo con The North American Menopause Society, se proyecta que en 2025 habrá 1,000 millones de mujeres en el mundo que transiten a esta fase. ¿Los centros de trabajo están preparados para ello? Aparentemente no todos.
Tampoco parece que lo consideren una prioridad, según Bárbara Ortega, directora de Ventas para LATAM de Reckitt Benckiser, empresa que manufactura bienes de consumo masivo de cuidado del hogar, la higiene y la salud.
“Quizá no es un problema de falta de interés, sino que el desconocimiento de una vivencia hace que no la tengan presente. La empresa en la que trabajo está muy enfocada en trabajar a favor de la inclusión y diversidad, ha crecido mucho para empoderar las carreras de mujeres que inician o de asegurarse que haya paridad en los puestos directivos; sin embargo, la menopausia sería la última de sus preocupaciones porque no estaría por encima de diversidad y empoderamiento”, dice en entrevista con Expansión Mujeres.