¿Qué con los costos de los servicios de duolas?
Para Parra, profesionalizar y remunerar estos cuidados implica que más personas pueden acompañar a mamás, a bebés, a familias enteras. Y las personas que acceden a estos conocimientos, cuyo rigor puede ser la diferencia para esa mamá que contrate los servicios o no.
“Yo trabajo con familias que pueden pagar mis servicios, pero también con aquellas que tienen más dificultades y siempre estoy abierta a resolverlo de otro modo”, señala.
De acuerdo con Fernando Jiménez, director médico de El Nido Centro Materno Infantil, médico ginecoobstetra y partero, la asistencia de una duola oscila entre los 12,000 y 27,000 pesos por sus servicios.
Por ejemplo, Marea Dual, debido a la pandemia modificó su oferta para poder cumplir con las medidas de distanciamiento social. A través de sesiones de zoom, durante dos meses, ofreció acompañamiento a mujeres embarazadas por 115 dólares, alrededor de 2,300 pesos mexicanos.
Al igual que Parras, Jenny Bertha, directora de Centro Integral de Embarazo y Lactancia, trabaja con mujeres que no tienen dificultades para pagar sus servicios con dos objetivos: remunerar el trabajo que realizan mujeres y también subsidiar a otras familias que no pueden pagar por los servicios.
Cappa Latinoamérica, como se conoce al centro donde trabaja Jenny Bertha tiene presencia en Estados Unidos desde hace 23 años, y desde hace 10 en México, Ecuador, Bolivia, Panamá y República Dominicana.
“Yo estudié Matemáticas, pero me di cuenta de que yo era de estar con las personas. Por eso nació este proyecto que ha crecido con el tiempo siempre con la idea de que los cuidados son para las mamás, no para los bebés”, dice sobre las profesionales.
El Latinoamérica el programa de doulas puede iniciar desde el embarazo y terminar hasta después de los primeros tres meses de que nació el bebé, a diferencia del programa de Estados Unidos, donde los costos de trabajo doméstico y de cuidados son más elevados y pocas personas, en comparación de América Latina, pueden pagarlo.