Detalla que hablar de los rechazos con personas de confianza permite identificar todas las áreas de oportunidad que se pueden desarrollar, así como reconocer cuando la negativa tampoco tuvo que ver directamente con ellas, sino con otros factores.
Por ejemplo, Karla Hernández, contadora, cuenta que en una ocasión le negaron un incremento de sueldo tras dos años de empleo, porque aún no cumplía con el tiempo necesario para solicitarlo, que eran dos años y medio. “Puedo entender eso, pero el problema fue cuando me enteré que tres hombres que entraron después que yo, en mi mismo puesto, sí lo recibieron. Y la brecha era aproximadamente de 10,000 pesos. Más que enojo, me sentí muy mal por no haberme ganado el aumento”, dice.
María Saénz, que trabaja como asistente administrativa, explica que durante una etapa como maestra de inglés recibió más carga administrativa y de responsabilidad en sus labores, pero cuando solicitó un aumento de sueldo después de un año de realizar funciones adicionales a las que su contrato contemplaba recibió una negativa.
“Me dijeron que no me lo darían porque estaba ganando experiencia y jerarquía”, cuenta.
Ana Estrada, directora y fundadora de Brújula Interior, una organización dedicada al desarrollo empresarial y profesional, considera que es importante tener presente que a lo largo de nuestra carrera laboral pasaremos por varios rechazos a nuestras propuestas. Para enfrentarlos correctamente, recomienda aceptar esa realidad, ya que eso evita la sensación de que “es personal”; así como a comunicarse de una manera basada en hechos y no emocional.
Estrada afirma que si se logra superar o asimilar el rechazo, se ganará confianza, paciencia y la capacidad de enfocar mejor el trabajo.
Por su parte, Carlos Rendón, director de Holastaff, compañía dedicada a orientar empresas de tecnología en materia de management, recomienda mantener apertura en el momento de hacer una solicitud pues, advierte, cuando se propone algo es posible que las personas simplemente no compartan la perspectiva de la postulante, pero no debe ser motivo suficiente para dejar de proponer nuevos proyectos.
“Cuando pides un aumento de sueldo u otra posición, siempre debes considerar que te pueden decir que no, pero igual hazlo. Y si te dicen que no, para que te quedes más tranquila, asegúrate de entender las razones por las cuales no te están dando lo que pides”, dice.