La levantadora de pesas Laurel Hubbard será la primera atleta transgénero que compita en los Juegos Olímpicos tras ser seleccionada por Nueva Zelanda para la prueba femenina de los Juegos de Tokio, una decisión que reavivará el debate sobre la inclusión y la equidad en el deporte.
Hubbard competirá en la categoría de peso superpesado de más de 87 kilos, y su selección fue posible gracias a una actualización de los requisitos de clasificación en mayo.
La deportista de 43 años, que será la levantadora de más edad en los Juegos, había competido en halterofilia masculina antes de hacer la transición en 2013.